Mesa sabe escribir y, además, lo hace bien. Los mayores deberíamos contarnos un cuento antes de ir a dormir, también nosotros lo necesitamos. Este libro de relatos te golpea la espalda y te dice «ves, siempre hay otro punto desde el que asomarnos al balcón de la vida» . Y creo que el punto fuerte de la escritura de Mesa radica precisamente en ese punto de vista tan subjetivo que tiene a la hora de mostrarnos las cosas.
Personalmente, creo que es el mejor libro de esta autora.
Me quedo con el relato Papá es de goma.